Francisco de Goya fue un pintor y grabador español.Su obra abarca la pintura de caballete y mural,el grabado y el dibujo.En todas estas facetas desarrolló el Romanticismo.Una grave enfermedad que le aqueja en 1793 le lleva a acercarse a una pintura más creativa y original,que expresa temáticas menos amables que los modelos que había pintado para la decoración de palacios reales.Una serie de cuadritos en hojalata,a los que él mismo denomina de capricho e invención,inician la fase madura de la obra del artista y la transición hacia la estética romantica.Ademas su obra refleja el convulso periodo histórico en que vive,particularmente la Guerra de la Idependencia,de la que la serie de estampas de Los desastres de la guerra Los desastres de la guerra es casi un reportaje moderno de las atrocidades cometidas y compones una vision exenta del heroismo donde las victimas son siemore los individuos de cualquier clase y condicion.
La Ascension de la virgen y San Iñigo es una pintura realizada sobre la madera de las puertas de 230 por 70 cm de un armario de reliquias de la Sala Capitular de la iglesia de San Juan del Real de Catalayud atribuida a Francisco de Goya
La pintura representa una escenografía celeste y sobrenatural a la que ascienden dos figuras, la Virgen María e Iñigo Abad, santo mozarabe fallecido en 1068 patrón de Calatayud.
Con motivo de la restauración de la decoración pictórica del armario empotrado de la Sala Capitular de San Juan (actualmente convertida en espacio museístico), se planteó en marzo de 1999 la autoría de Goya, avalada por el restaurador Patxi Roldan y por Rogelio Buendia, catedrático de la Universidad de Barcelona y profesor emérito de la Universidad autonoma de Madrid
Patxi Roldán propone que Goya pudo pintar la Ascensión de la Virgen y San Íñigo en los años 1760 y Rogelio Buendía aseguró que las tablas guardan estrecha relación con las del armario que pintó en su ciudad natal Fuentedetodos en 1762 desaparecidas en la Guerra Civil , que son conocidas por fotografías.1 Sin embargo, Manuela Mena, conservadora jefa de la pintura de Goya del Prado rechaza la atribución debido a la tosquedad de la obra.
El cacharrero (1779) es uno de los cartones para la Real Fabrica de Tapizes de Santa Barbara de Francisco de Goya y estaba destinado la decoración del comedor de Carlos IV, entonces Principe de Asturias .
De este cartón, que se encuentra en el Museo del Prado se hicieron dos tapices que se conservan en el Palacio de el Pardo el mencionado palacete de los príncipes y en El Escorial.El cuadro fue tasado en seis mil reales y ha sido estimado, junto con El Quitasol (1777) como la obra cumbre del periodo inicial de Goya en Madrid
La Aparición de la Virgen del Pilar a Santiago y a sus discípulos zaragozanos es una pintura del joven , pintada entre 1768 y 1769. Es la única pintura de Goya que ha sido exhibida en Fuendetodos, lugar natal del pintor, el 14 de enero de 1996
El esquema compositivo e iconográfico del cuadro tiene su precedente en las primeras pinturas de Goya, ejecutadas en Fuendetodos y destruidas durante la Guerra civil. La composición, en forma de pirámide será repetida por Goya a lo largo de su carrera, como en El bebedor y La pradera de San Isidro, de sus cartones para tapices.
El cuadro representa la aparición de la Virgen del pilar al apóstol Santiago el Mayor y algunos de sus discípulos en Casaegusta. Cabe aclarar que la tradición católica señala que en el año 40, la Virgen Maria se presentó a Santiago en Zaragoza, para animar al apóstol en la prédica por Hispania.
Fue dada a conocer por Jose Gudiol en 1970. Procede de los fondos pictóricos de Juan Martín de Goycoechea y Galarza. Llegó a su actual emplazamiento —la colección Pascual de Quinto en Zaragoza través de herencias y enlaces interfamiliares.
Es la pareja de la llamada Triple Gnereacion y posee rasgos estilísticos muy comunes a La adoracion del nombre de dios(Coreto de la Basilica del Pilae), así como al Bautismo de Cristo y el Retrato de Juan-Martín de Goycoechea. Todos estos cuadros fueron recibidos en herencia por la segunda condesa consorte de Sobradiel.
La obra acusa la influencia del maestro de Goya, Jose Luza, Valeriano(2005), no considera que se conserve obra alguna de Goya de esta época, con las siguientes palabras: «¿Qué aprendió con Luzán? Algo cabe concluir examinando la pintura del maestro, pues del propio Goya nada se conserva de aquellos años». Es por esta razón que es más prudente hablar de una obra de juventud, pero no de formación, y atribuirle la fecha de 1768-1769.
La caza de la codorniz es un cartón destinado a servir de modelo a un tapiz que iba a decorar el comedor de los Príncipes de El Escorial junto a otros de diversos formatos que figuraban, por ejemplo, perros de caza o útiles de este ejercicio, como Perros de Tailla, Caza del Jbali o Caza con mochuelo, todos de 1775. En este primer año de su trabajo como pintor de cartones para tapices con destino a la Real Fabrica el trabajo de Goya estaba estrechamente dirigido por su cuñado Francisco Bayeu, que bosquejaba los borradores sobre los que posteriormente trabajaba Goya. La caza de la codorniz revela el estilo de los cartonistas de la corte, especialmente el de Jose del Castillo del hermano de Francisco,Ramon Bayeu
En el cuadro se aprecian distintos momentos de la caza de la Codorniz. En primer término, a la derecha, aparece un cazador con su perro rastreando. Consecutivamente, y a la izquierda, un poco más al fondo se muestra el disparo mientras el perro espera agazapado. Al fondo y siguiendo un recorrido en diagonal, a la derecha aparecen dos hombres y más a la izquierda una partida de jinetes y perros que dan alcance a las presas.
El objetivo compositivo es dar variedad a la unidad temática de la caza de la codorniz, representando todos sus momentos típicos, es decir, pintorescos. Pero la dificultad estriba en conseguir la interrelación de los distintos motivos representados, lo que en este cuadro perteneciente a la primera serie de tapices, Goya no logra con resolver con solvencia. Y ello porque dispone a los grupos separados por taludes, para no crear confusión entre los conjuntos de figuras, y ello a costa de aislarlos y romper la unidad. Por otro lado, el cuadro podría entenderse como una sucesión de viñetas que representan en orden cronológico los distintos momentos de la caza, pero Goya no volverá en los cartones a optar por este tipo de fragmentación.